04/09/2025 - Edición Nº269

Industriales

Rizzotto: “Ser industrial es crear valor, crear valor en todo sentido”

24/08/2025 19:00 | Mauricio Rizzoto lidera la empresa fundada hace 70 años por su padre y su tío, Poleas RP de Rafaela, Santa Fe. Apasionad del hacer industrial y de la colaboración gremial empresaria, integra ADIMRA y preside la Cámara Metalúrgica rafaelina. “No veo otra forma de construir industria que no sea a través de las instituciones” asegura



Por redacción Argentina Produce

MARIANA CONTARTESSI: Bienvenidos a un nuevo episodio de ADN Industrial en este ciclo de entrevistas que tenemos en el marco de Argentina Produce. Hoy estamos con Mauricio Risotto. Mauricio, bienvenido, ¿cómo estás?

MAURICIO RIZZOTO: Muy bien, muy bien, muchas gracias por la invitación.

MC: Sí, le puse un tono italiano, me parece, le di como un extra. Pero Mauricio, como le di un extra, quiero aprovechar, y en realidad siempre es mejor que ustedes se presenten. Contanos de vos.

MR: Bueno, soy Mauricio Rizzoto, tengo 54 años, casado con Romina, papá de Camila y Juana, soy de la ciudad de Rafaela, pertenezco a la Cámara Metalúrgica de la ciudad de Rafaela.

MC: La querida provincia de Santa Fe. Contanos de tu empresa.

MR: Nosotros tenemos una empresa familiar, tenemos en realidad dos empresas. La unidad de negocios principal es una fábrica de poleas industriales, son poleas para maquinaria, para bienes de capital, y también tenemos una fundición de hierro gris, nodular y acero, donde principalmente ahí fabricamos la materia prima que consumimos nosotros para fabricar las poleas.

MC: ¿Sos fundador o sos segunda generación?

MR: No, segunda generación. Mi papá y mi tío son los que fundaron la empresa ya hace 70 años. Ninguno de los dos hoy está con nosotros. Y bueno nosotros tomamos la posta con mi primo y también está mi hermana y mi prima como socias que no participan de la empresa de la operación digamos, pero sí con mi primo y particularmente yo me integré hará unos 22 ó 23 años donde empecé a dar vuelta por algunos procesos y conocer bien todo el proceso productivo y las cuestiones que podían mejorarse en la empresa. Ahí fui un poco sumando experiencia y tomando algunos roles, hasta que bueno, con el fallecimiento repentino de mi papá, que fue un accidente de autos, hizo tener que liderar la empresa de un día para el otro, tomar un rol en el cual todavía no me estaba preparando, pero bueno, ese fue el desafío.

MC: ¿Y cómo fue el proceso de ingresar a la empresa? Porque dijiste que fue hace 22, 23 años, entiendo que primero hubo otro camino tuyo.

MR: Sí, yo estudié en Buenos Aires, Licenciado en Administración. Siempre mi papá me ponía un desafío que él no quería que vaya a trabajar en la empresa. Una vez, yo siempre digo que él eso lo hacía como de una forma, buscando que realmente...

MC: Quería, pero no quería.

MR: Entonces presenté una vez a él y a mi tío como un proyecto de inserción donde planteaba esto, de pasar desde los procesos más básicos de la empresa para ir conociéndola, creando un área de calidad que en ese momento no estaba y eso me hacía conocer bien todo el proceso. Y que después de todo ese recorrido veíamos si ellos entendían que podía ocupar un espacio.

Esto, como dije antes, en el medio de ese recorrido estuvo el accidente de mi papá y bueno ahí todo cambió. Pero en realidad yo el contacto con la empresa a inicio cuando yo era muy chico, tenía 5años y la empresa estaba al lado de mi casa, y el garage de mi casa tenía una puerta que se conectaba con el equipo. Entonces yo jugaba ahí, digamos, la verdad que siempre la viví de muy chico.

MC: Y cuando decís, siempre la viví de muy chico, entiendo también que a medida que fuiste creciendo y hasta que te incorporaste, también viste los vaivenes, no sé si de una empresa, pero de un país, obviamente, que tuvo mejores épocas, peores. De todo ese proceso vivido, ¿qué reflexión haces?

MR: Mi papá tuvo el accidente y yo tomé un poco el liderazgo como gerente general fue en 2001 (en mayo de 2001 tuvo el accidente), y a fines de 2001 vino lo que sabemos en el país, con lo cual yo siempre digo que fue como un posgrado acelerado de cómo enfrentar una crisis sin haber tenido experiencia, obviamente muy apoyado en mi tío que estaba y era uno de los fundadores y en todo un equipo el trabajo que hace muchos años que venía y viene trabajando porque sigue trabajando en la empresa, donde fue el sostén para empezar.

Yo entiendo que, de todos esos procesos, ese y otros, y anteriores que por ahí escuchaba de ellos que me contaban, siempre hubo esa capacidad de resiliencia y de aprendizaje y de abordaje entre todos. Nuestra empresa siempre, como todas las pymes, pone en valor y puso en valor los colaboradores que trabajan. En la mayoría de las crisis no hemos despedido gente, la variable de ajuste no fue por ahí, pero bueno obviamente que eso a veces el tiempo lo que te permite hasta dónde llegar. Cuando se hacen muy largas las decisiones empiezan a ser más dolorosas; en ciudades chicas como la nuestra, nosotros compartimos muchísimas cosas con las personas que trabajan en esta empresa, compartimos club o los hijos van al colegio con nuestros hijos.

MC: ¿Cuántos empleados tenés entre las 2 empresas?

MR: Entre las dos empresas hay 70 colaboradores; una está en Rafaela y la otra está a 15 kilómetros en una localidad que se llama Lehmann, que es una localidad de 4.500 habitantes, así que ahí incluso es mucho más cercano.

MC: O sea, las familias están involucradas directamente en la vida de fábrica.

MR: Totalmente. Entonces, bueno, las crisis nos han hecho repensar, nos han hecho ser más creativos, pero no por eso no han sido dolorosas.

MC: ¿Cómo es tu ingreso a la gremial, Mauricio?

MR: Yo a la gremial me incorporé hace unos 16 años, 17 años en Rafaela. Un dirigente de meteorológico que había asumido como presidente que yo no conocía, me llamó para incorporar la Comisión directiva de la Cámara de Rafaela y ahí empecé a incursionar y realmente descubrí otro mundo. Yo ahí me di cuenta de que era alguien que estaba encerrado en mi propio mundo operativo industrial y que creía que los problemas que tenía eran sólo míos…

MC:  Y tremendos, además.

MR: Claro, y que era una incompetencia mía, o muchas de estas cuestiones que por ahí nos interpelamos, ¿no? Y ahí encontré un espacio donde me di cuenta de que era otro el mundo industrial, y que era súper colaborativo, y la verdad que me sedujo un montón, y me enganché y no paré, ahora que pasé por distintas instituciones.

MC: Bueno, y sos pro secretario.

MR: Sí, y todas enriquecen mucho. Y lo colaborativo creo que es clave para poder afrontar, porque en definitiva tenemos problemas comunes, intereses comunes, después tenemos intereses particulares, obviamente, pero donde tenemos que trabajar es en eso, en los intereses comunes, en lo que entendemos que es mejor para la industria metalúrgica, o en otros ámbitos, yo participo también de la Federación Industrial de Santa Fe, de FISEC, que soy vicepresidente, donde ahí no hay solo metalúrgica, sino que hay toda la industria. Y la verdad que no veo otra forma de construir industria que no sea a través de las instituciones.

MC: Qué fuerte esto de que no ves de otra manera construir industria que no sea a través de las instituciones. Y tomo esa frase para preguntarte cuáles son las necesidades más urgentes hoy, que las debaten, no sé, hasta que estamos haciendo esta charla, me imagino que venís también de debatirlas. Así que dame lo fresco de lo que pusieron sobre la mesa en estos últimos tiempos.

MR: Sí, la verdad que yo entiendo que estamos en una situación un poco compleja porque estamos ante una apertura digamos de la economía, donde la apertura por sí misma no es algo malo, sino que creo y creemos digamos que esa apertura debe de hacer mejor administrada para poder ponernos a nosotros como industria nacional en las mismas condiciones de competitividad con los países que quieren vender acá y nosotros con los países donde queremos vender, para poder competir principalmente con precio.

No tengo ninguna duda de que la industria argentina tiene la tecnología y los estándares de calidad a niveles de los mejores del mundo y eso no lo digo con una sensación, tengo la suerte de a través de haber transitado y transitar las gremiales conocer mucha industria de argentina y también por haber cuestiones particulares de haber estado en otros lugares del mundo, también conocer industrias en otros países desarrollados y eso claramente me hace ver que no tenemos una brecha tecnológica y que los estándares de calidad nuestros son muy altos.

Entonces eso por un lado me dice que como industriales estamos vivos, nosotros hemos hecho y hacemos las cosas bien, debemos tener un marco competitivo y ahí lo divido en dos conceptos claros: la cuestión de la productividad y la productividad si es una responsabilidad netamente nuestra, de ser más productivos con las puertas hacia adentro, hacer las cosas mejor, mejores tiempos, con mejor calidad. Lograr realmente tener un nivel de productividad que la industria argentina en general tiene niveles de productividad iguales o incluso mejores que en la región, pero siempre se puede mejorar.

Y después está la competitividad; Ya la competitividad es un tema sistémico, no depende solamente de nosotros, ahí es donde el Estado tiene que jugar, porque esa competitividad que nos da el peso de los impuestos o la estructura impositiva, no digo el peso, la estructura impositiva, las legislaciones laborales, no solo por los costos laborales, sino por la flexibilidad. También nos da la infraestructura industrial que tenemos, la descentralización de los puertos. Un montón de cuestiones que tienen que ver con la acción del Estado, que no dependen netamente de nosotros. Entonces, muchas veces, un producto nuestro, en las puertas de nuestras industrias, llega a un costo competitivo y cuando empezamos a atravesar todo esto que nombré, es donde nos saca del mercado. Ahí es donde digo que la apertura debe ser administrada, denos las mismas herramientas de juego, las mismas reglas de juego que tienen nuestros competidores y seguramente nosotros vamos a ser parte de la solución, no somos parte del problema. Nosotros somos los que podemos generar dólares genuinos con las exportaciones, pero para eso tenemos que poder competir. Nosotros nos hacemos cargo de dónde tenemos que mejorar y el Estado también tiene que hacer lo suyo.

MC: Cuando señalás que el Estado tiene que hacer lo suyo ¿Se puede hablar de reducción de impuestos? ¿Algún tipo de beneficios? ¿Dónde puntualmente sentís que hay que empezar a trabajar una política pública?

MR: Sí, entiendo que por ahí porque justamente cuando uno habla de que el Estado tiene que hacer lo suyo, para nada me refiero a subsidios o a querer hacer algo competitivo en forma ficticia. Nosotros debemos tener una competitividad real ¿Qué tiene que ver con esto? Con la estructura impositiva, con la carga impositiva, con la facilidad para poder trabajar con este tipo de impuestos. Hoy realmente el Estado, y es a lo largo del tiempo porque tampoco me refiero específico a un gobierno, es Argentina en el tiempo, el Estado ha ido transfiriendo burocracia dentro de las empresas también. Muchas de las cuestiones que tenemos que gestionar tienen que ver con este tipo de liquidación de impuestos o que tenemos que retener o que tenemos que ponernos a meterle cabeza a lo que no es nuestro negocio principalmente.

Obviamente que hay que revisionar la estructura impositiva, simplificarla, hacerla más baja. En lo laboral, como dije, no solamente bajar el costo laboral, sino hacerlo más flexible, pero siempre pensando, no en que las personas que trabajan en una empresa deben ganar menos, porque aparte somos convencidos que si hay algo que genera valor es la industria, por la cantidad de capacitación que necesita permanentemente, por la innovación, el capital humano que está en las empresas es un capital humano de alta calidad, por eso las pymes hacemos lo imposible para no desprendernos de nuestro capital humano. Pero ese capital humano debe poder estar bien remunerado, Y tal vez hoy, lo que nos cuesta laboralmente, tal vez la persona que trabaja en la empresa se lleva un 50% del costo total. Entonces, es trabajar en esas cuestiones, en tasas de financiamiento.

Nosotros vemos países que traccionan mucho sus ventas hacia el exterior con un apoyo muy fuerte en lo financiero, con tasas realmente que le permiten no solamente invertir en sus empresas, sino salir a ofrecer a sus clientes posibilidades de compra. Es profundo, obviamente es desenmarañar algo que viene construyéndose desde hace mucho tiempo, y nosotros estamos dispuestos a poner sobre la mesa lo que haya que poner, digamos, y poder discutir estas cuestiones para demostrar que, como dije, que somos no parte del problema, sino parte de la solución.

MC: Mauricio, en esto que contabas, me abriste como dos aristas a consultarte. La primera es, vos decías, la retención de personal que es importante porque hay inversión en ese trabajador que lo tenés que capacitar por la tarea específica que hace. ¿Cómo trabajas vos desde tus empresas en retener, capacitar, retener, estimular un mercado laboral, sobre todo de lo apunto a gente joven, que cada vez más no es solamente el afecto por el lugar en el que trabajas, sino las necesidades, inquietudes de ir conociendo y cambiando de empleo?

MR: Sí, es un desafío muy importante, sobre todo para las pymes, que a veces, por un lado, tenemos la flexibilidad de una pyme, pero a veces no tenemos los recursos que puede tener una gran compañía donde puede brindar distintas soluciones al personal. Nosotros hace ya 3-4 años, en función justamente de esto que mencionás, realmente incorporamos el área de recursos humanos profesionalizada en las empresas, con lo cual empezamos a detectar muchas de estas cuestiones que necesitan nuestros colaboradores de nosotros. Y ahí esto es interno y ahora te voy a hablar hacia afuera. Internamente tratamos en los espacios que se puede el trabajo flexibilizarlo de alguna manera para sentirse cómodo, para que el colaborador esté cómodo, digo, o trabajo mixto, en algunos casos, o cuando necesita el trabajo remoto poder hacerlo, o en nosotros que somos localidades más chicas, por ahí alguna necesidad de porque tienen que buscar a los chicos en el colegio o estas cuestiones simples tal vez de la vida, pero que les permiten también ordenarse y estar más con su familia que lo que buscan, algunos los que no lo tienen buscan otras libertades. Pero trabajamos en esto, mucho de tratar de detectar y de acercarnos a través del área de recursos humanos, de acercarnos y escuchar. Y hacia afuera, nosotros en la ciudad de Rafaela, tenemos una de las tantas cuestiones que valoramos mucho, es que tenemos muy aceitado el entramado público-privado, la articulación pública-privada. Entonces, tanto con las instituciones universitarias, como algunos institutos de formación, ahí es donde trabajamos mucho.

En nuestro centro comercial e industrial de Rafaela, trabajamos con todas estas instituciones que incluso hemos conformado como un grupo que nos llamamos tecnológico, donde ahí participan todas. En Rafaela misma hay un Centro Universitario de Rafaela donde todas las universidades se juntan para discutir qué es lo que necesita Rafaela como mercado laboral. Y se juntan obviamente con nosotros en eso. Y ahí empezamos a interactuar y a poder retroalimentarnos de las necesidades y surgen programas de capacitación, carreras cortas, carreras más largas. ¿

MC: ¿Y cómo trabajan con los jóvenes? Donde yo siempre digo que el tema streaming, influencer, y esto de la volatilidad de quedarte y saltar de un trabajo a otro, es muy notorio. Para que se estimulen en tener trabajos que integran el sistema productivo, como son tus empresas. Y que hoy está muy volcado al área de servicios. ¿Cómo captan, cómo buscan esos talentos jóvenes que quieran entrar al sistema productivo argentino?

MR: Ahí nos ayuda un poco el universo de Rafaela y la región, porque nosotros estamos en una zona muy industrial, muy productiva, con lo cual quien nace en Rafaela digamos tal vez tenga una esperanza de trabajar en la industria.

MC: Ahí tenés un paso ganado.

MR: Seguramente en su mesa hay alguien que trabajó o trabaja en la industria. Entonces ahí es donde se nos facilita un poco. Después nosotros estamos muy acostumbrados a competir en este sentido industrialmente ¿Por qué? Porque Rafaela tiene una industria muy diversificada: alimenticia, metalúrgica, textiles, química. O sea, es una ciudad de 120.000 habitantes, pero su industria es muy diversificada, comercios muy fuertes. Con lo cual, es como que también estamos acostumbrados a poder competir para que no se nos vayan nuestros recursos humanos hacia otro tipo de industria o hacia estos comercios mismos.

El trabajarlo es esto, ver cómo seducir, ver qué hacen otros, qué están haciendo los otros rubros, para seducirlo, para también nosotros poder incorporar algo de eso. Y después llega un punto que las personas deben ser felices también, y encontrar su lugar y sus espacios, y si no se siente cómodo en una industria, si cree que ese no es su lugar, seguramente es lo mejor para esa persona y para nosotros también, porque a la larga vamos a necesitar personas que sientan la industria para poder construirlo.

MC: Mauricio, vos sos segunda generación, sos joven, tenés tus hijos jóvenes, ¿añorás que haya tercera generación o qué mirada tenés sobre eso?

MR: Como añorarlo, sí, creo que es natural, pero no es algo que voy forzando, ¿no? La verdad que yo, con este mismo concepto que dije antes, yo creo que cada uno de nosotros debe sentirse realizado y ser feliz en el lugar donde lo siente. Yo fui a trabajar a la empresa porque así lo sentí, nunca fue un mandato como lo conté antes, ni alguien me vino y me dijo tenés que venir. Yo soy feliz, me siento realizado, soy feliz por más que tengo que abordar muchísimos problemas, pero siempre me genera satisfacción cada día que vuelvo. Entonces esa tercera generación, obviamente que a mí me encantaría, ya sean mis hijas o los hijos de mi hermana también, pero yo principalmente siempre pienso en que la empresa es una persona distinta, y que nosotros tenemos la obligación de hacer que la empresa trascienda mucho más allá de la familia porque cumple un rol social fuertísimo. Entonces sería muy egoísta solamente centrarme en pensar en que la tercera generación sea la que venga a llevarla más arriba. Y en ese contexto el secreto es profesionalizar. Nosotros estamos en un camino de profesionalización bastante fuerte. Y después veremos quién ocupa esos espacios. Yo también soy un convencido que yo en algún punto, tal vez de acá a 5 o 10 años como máximo, tengo que cumplir otro rol, y no tanto en la operación y tiene que venir gente que no ve más. Ese es el camino.

MC: Mauricio, contanos qué es ser un industrial, paramos, qué significa.

MR: Para mí, la verdad que ser industrial es crear valor, es crear valor en todo sentido. No solamente crear valor en un producto, digamos, en la transformación. Realmente uno cuando transita las distintas industrias, cómo algo se transforma en otra cosa, para mí es maravilloso, digamos. Pero yo creo que crea un valor social, ¿no? Y esto que decía, hay muchas capacidades. Las personas que trabajan en industria están permanentemente con desafíos nuevos. O sea, el mundo nos va metiendo desafíos, tenemos que innovar. Hace que la gente le meta cabeza, esté en el puesto que esté ocupando, ¿no? Porque eso innova. Entonces yo creo que creamos valor no solamente en productos, sino que en las personas y a través de las personas, en la sociedad. Eso creo que es la industria.

MC: Un placer conocerte. Muchas gracias a vos

MR: Gracias.